Casting Reborn

Poco había pasado desde que la maldición había culminado. Sus sombra se sentía mas como propia que como un simple recuerdo; ahí, prolongada hasta la pared de aquella habitación. Como un recordatorio de lo que podría volver a ser. Había perdido mucho con el paso de los tiempos, por culpa de aquella maldición que había profanado su espíritu. Se había corrompido hasta el mismo hueso. ¿Donde había quedado aquel preciso asesino quien, sin siquiera poner un pero, colocaba bala tras bala en sus objetivos? Ahora solo era un niño que, si bien hacia su trabajo eficientemente, no podía decir que seguía siendo un asesino. Su corazón se había emblandecido con el pasar de los años con aquel aspecto pero, sobre todo al estar junto a tsuna. Él le recordaba en gran manera a Luce. Siquiera el pronunciar su nombre le hacía sentir aquel gélido viento en su espina dorsal. Recuerdos que había creído borrar pero, bien lo dicen "Incluso la herida menos profunda, con el tiempo volverá a abrirse".

Ya era suficiente de lamentaciones. Si bien la maldición le había quitado la vida, esto era una segunda oportunidad. Era momento de recobrar lo que había sido, recobrar el tiempo y sobre todo, vivir de diferente manera a como había vivido. Había sido un largo tiempo el cual había pasado siendo el padre de los demás, siendo el pilar que sostenía las penas de los demás arcobalenos. Por tanto tiempo tratando de liberarlos de aquella maldición. Todo para que, al final de todo ello fuese un inútil quien les liberara por completo de dicho suplicio. Pero al menos, había sido su idiota.- Dame Tsuna, despierta. Un líder no puede dormir mientras su mafia se derrumba ewe -Una delicada voz emergía de sus cuerdas vocales cosa que, en aquellos tiempos, no era. A pesar de su pequeño y frágil aspecto, aquel niño sin problema alguno levanto un tremendo mazo por sobre su cabeza, el cual incluso era más grande que si mismo. Sin previo aviso, y sin que el pobre Tsuna se diese cuenta, aquel herramienta callo en seco sobre su grueso cráneo, provocando así que su rostro se hundiese sobre el colchón donde dormía.

Sus ojos se abrieron exorbitantemente pareciendo incluso, que se desprendían de sus cuentas. Un exuberante grito escapo del pobre niño mientras este despertaba sobando su cabeza- ¡QUEEEEEEE! ¿A QUE TE REFIERES CON, MIENTRAS SU MAFIA CORRE PELIGRO? -Decía agitando sus brazos en el aire- No quiero saber más de ese mundo, no quiero saber más de la mafia reborn. Entiéndelo ! NO QUIERO MORIR¡ - Aquellas palabras resonaron en su cabeza por unos instantes. Pero en el fondo, para él era una eternidad. Nadie quería morir, incluso quienes daban su vida, no lo querían. Pero, si no se luchaba por lo que creían, aquellas vidas no se significarían nada. "Ojala lo comprendieras, Tsuna. Ojala supieras lo que yo veo en ti, que tú no puedes ver siquiera asomándose por tus hombros". Nuevamente, aquel mazo se levanto por los cielos, calendo de la misma forma que la furia de dios cae sobre la tierra. Aquello era el sonido de los huesos de aquel pobre diablo quebrándose. Un derrame, tal vez. Una contusión, probablemente. Tsuna jamás seria el mismo.- DAME, DAME -Gritaba aquel pequeño conforme continuaba golpeándolo.

"Ojala, Tsuna. Ojala algún día logres ser lo que se que puedes ser. Espero algún día logres entender lo que es, en verdad proteger a quienes amas"- DAME, DAME- Golpe tras golpe, los ojos de tsuna quedaban en blanco. Había perdido el conocimiento pero, eso no detenía a Reborn.- NO TE DUERMAS, DAME -"Protegerlos, con tu última voluntad. Aun si ello significa poner en riesgo tu vida. Eres el único inútil que puede resolver todo. El único, con el corazón y la voluntad necesarios para ello." Las palabras resonaban en el corazón de reborn quien aun, intentaba hacer entrar a tsuna aquellas palabras golpe tras golpe. Su cuerpo callo en el suelo con la cabeza llena de uno y otro chipote. Parecía mas un cuerpo espín que un ser humano. Y al fin, Reborn dejo de golpearlo- Recordé... Que hoy era tu cumpleaños -Dijo el niño mientras con su pequeño puño cerrado le propinaba un tremendo golpe a tsuna- Eso es por no recordádmelo, dame -Sujeto su sombrero inclinándolo un poco hacia abajo. Su rostro se encontraba cubierto por aquello mientras este se alejaba del niño saliendo al fin de la habitación preguntados si este sería el fin de Vongola. Aquella vongola que el conocía, aquella que el recordaba. Aquello por la cual dio su tiempo.

{ Casting Aprobado }